domingo, 30 de diciembre de 2012
La guía para conseguir el balance ácido-alcalino
Los riesgos de salud al comer pan blanco
sábado, 22 de diciembre de 2012
La diferencia entre comer fruta y tomar zumo
En efecto, un zumo natural aporta minerales y otros valiosos nutrientes que nuestro cuerpo aprovechará con eficacia. Pero podríamos debatir si esta gran eficacia es algo bueno entre personas con sobrepeso. Al exprimir la fruta, estamos eliminando prácticamente toda la fibra, uno de los nutrientes más valiosos, y también otros componentes que moderan la velocidad de digestión. Al tomar un zumo en forma líquida y sin elementos que dificulten su procesamiento, sus componentes (incluido el azúcar) son rápidamente digeridos y absorbidos. Esta situación tiene su respuesta metabólica, diferente a la que ocurre cuando se come una fruta completa.
En el ya clásico estudio de 1977 "Depletion and disruption of dietary fibre. Effects on satiety, plasma-glucose, and serum-insulin" se mostraba con unos sencillos gráficos la diferencia entre comer fruta y tomar su zumo. En el primero de ellos se presentaban los resultados obtenidos en la variación de la sensación de saciedad para la manzana, en tres acabados: Completa (línea continua), en puré (línea discontinua) y zumo (línea de puntos):
Como puede observarse, cuanto menos consistente era el alimento, también su poder saciante era menor .
En el segundo gráfico se representó la variación de la insulina en sangre, para las mismas opciones:
En este caso, se aprecia cómo en el caso del zumo, el pico de insulina tras su ingesta fue mucho más elevado que el del puré, y todavía más que el de la manzana completa. Y como ya he comentado a menudo en este blog, esos picos tan acentuados de insulina tienen efectos poco deseables entre una buena cantidad de personas, especialmente para la prevención de la obesidad. Por ejemplo, en concentraciones muy altas de insulina se inhibe la lipólisis o utilización de las grasas como fuente de energía por parte de las células.
Poco después, en 1981 el estudio "The role of dietary fiber in satiety, glucose, and insulin: studies with fruit and fruit juice" obtuvo similares resultados con naranjas. La saciedad resultó ser bastante menor cuando se tomó el zumo y, al igual que en el caso anterior, los niveles de insulina eran significativamente mayores, como se puede ver en el siguiente gráfico:
(Aunque el estudio también se hizo con uvas, debido al elevado índice glucémico de esta fruta los resultados solo fueron coincidentes en términos de saciedad).
Por lo tanto, debido a estas respuestas de nuestro organismo, aunque el estudio observacional comentado al inicio del artículo encuentre relación inversa entre el zumo y el sobrepeso, existen otros importantes estudios que, al contario, encuentran una relación positiva entre ambos factores. Un ejemplo nos llegó de la mano del Nurses's Heatth Study II en 2004, "Sugar-Sweetened Beverages, Weight Gain, and Incidence of Type 2 Diabetes in Young and Middle-Aged Women". En este caso, las mujeres que aumentaron la ingesta de zumo de frutas también aumentaron más de peso que las que lo tomaron en menor cantidad; en concreto casi dos kilos más.
Por el momento, la ciencia parece indicarnos que el zumo natural con moderación no es especialmente negativo para poder adelgazar. Pero también ofrece claros indicios para pensar que es mucho mejor inclinarse por la fruta completa, ya que puede ayudar más a perder peso, aumentando la sensación de saciedad y reduciendo los picos de insulina.
Y que quede claro que en todo momento he hablado de zumo 100% natural, los zumos fabricados industrialmente a partir de extractos y similares son muy poco recomendables, porque prácticamente eliminan por completo la fibra y la reducción de nutrientes respecto a la fruta es mucho más acusada. De hecho, podríamos decir que son más parecidos a los refrescos, compuestos sobre todo de agua y azúcar.
jueves, 20 de diciembre de 2012
Súper alimentos para una súper salud
Envejecer es ir inflamándose. El Dr. Claudio Franceschi acuñó a este propósito el término inflammaging tras estudiar a personas centenarias y encontrar que éstas son más resistentes a las consecuencias de la inflamación.
A su juicio, "inflammaging es considerada la fuerza más importante para explicar las patologías asociadas con la edad, como los problemas neurodegenerativos, arterioesclerosis, diabetes o pérdida de masa muscular entre otras, todas las cuales comparten una causa inflamatoria".
Muchos tendrán la intención ahora de recurrir a la aspirina como solución. Sin embargo, los fármacos antiinflamatorios no son la respuesta, porque aunque mitigan la inflamación visible no manejan tan bien la inflamación celular a largo plazo ni carecen de efectos secundarios. A decir verdad, la inflamación celular, que podemos llamar silenciosa, ni la ves ni la sientes, hasta que dentro de años o décadas se traduzca en una enfermedad crónica. Y no me cansaré de repetirlo: es el exceso de carbohidratos y grasas vegetales altas en Omega 6, así como la falta de antiinflamatorio Omega 3 en tu dieta lo que inflama tus células. Ya lo decía el escritor chino Lin Yutang en su obra La importancia de vivir: "Nuestras vidas no están en manos de los dioses, sino en manos de nuestros cocineros".
El macroestudio JUPITER publicado en 2008 demostró que las personas con marcadores inflamatorios elevados tenían un significativo riesgo cardiovascular a pesar de tener el colesterol normal. Y dicho proceso inflamatorio es el mismo que acaba destruyendo el colágeno y elastina de tu piel. Sea tu objetivo reducir grasa corporal, mejorar tu rendimiento físico, tu aspecto estético o embarcarte en un estilo de vida que prolongue tu vitalidad y desafíe el envejecimiento, la mejor base es una dieta antiinflamatoria. Si, tal como bien decía Hipócrates, tu alimento es tu medicina, éstos son 10 grupos de fármacos con que elaborar la mejor dieta antiinflamatoria posible.
1. Pescados azules
2. Frutas
Hace 20 años nadie sabía de ellos y hoy son una parte protagonista de los estudios nutricionales: los polifenoles. Éstos son potentes antioxidantes que forman una categoría propia, pueden desactivar componentes inflamatorios críticos y desde hace unos años la ciencia les atribuye propiedades pro-longevidad (pensemos en el resveratrol del vino tinto). Frutos del bosque como arándanos, frambuesas, moras, fresas y otras frutas como cerezas o granadas son extraordinarias fuentes de polifenoles. Las manzanas regulan nuestro azúcar en sangre, lo cual es un objetivo central de la dieta antiinflamatoria, y su pectina favorece la saciedad.
3. Grasas bajas en Omega 6
4. Especias
5. Probióticos: Yogurt y kéfir
Probiótico es provida. El origen de los lácteos fermentados es realmente ancestral, pero la conciencia sobre sus beneficios no se inició hasta que a comienzos del siglo XX el Nobel de Biología Elie Metchnikoff formuló su "teoría de la intoxicación", por la cual las toxinas generadas en los intestinos aceleran la enfermedad y el envejecimiento. Su solución pasaba por consumir kéfir, un lácteo fermentado tradicional de la zona del Cáucaso en Rusia, y que ha alimentado su leyenda como alimento de juventud debido a la presunta alta longevidad de alguna de estas poblaciones. Un estudio de la Universidad de Tennessee de 2003 halló que el consumo de lácteos fermentados es útil para perder grasa abdominal. Evita por supuesto los productos azucarados, y si es posible también los edulcorados. Una de las riquezas de la leche materna es que estimula el crecimiento de bifidobacterias.
Post original: http://www.naturarla.es/adolfo-david-lozano/10-super-alimentos-para-una-super-salud-i
miércoles, 19 de diciembre de 2012
Construye tu six-pack a toda mecha
Consigue unos abdominales fuertes y superdefinidos en cuatro semanas con este movimiento intensivo del tronco. Además, de regalo, obtendrás unos anchos hombros.
Hazlo así
Semanas 1 y 2
Ejecuta cada movimiento 15 segundos por lado. Haz 3 movimientos por sesión.
Semanas 3 y 4
Aumenta a 20 segundos por lado. Haz 3 movimientos por sesión.
EN LA LÍNEA DE SALIDA
Preparados, listos… ¡Ya! Adopta la posición normal de flexiones de suelo con los pies separados en paralelo a los hombros. Si te cuesta mantener esta posición, apóyate en los codos.
Tensa los glúteos y aprieta los abdominales como si fueran a darte un puñetazo en la barriga. Eso no ocurrirá, pero lo que sigue tampoco será un paseo.
USA LA MUSCULATURA TRONCAL
Sin mover la parte superior del cuerpo, dirige la rodilla izquierda lentamente hacia el codo derecho, empleando 15-20 segundos.
AUMENTA LA POTENCIA
Ponte en la posición del tablón, de costado sobre un codo o, si puedes, sobre la mano.
Extiende el brazo libre por debajo del brazo de apoyo, empleando 15-20 segundos en el movimiento. Inviértelo y extiéndelo hacia el techo.
No tengas prisa: la estabilidad es clave para trabajar los músculos del vientre, algo nada fácil. Cambia de lado y repite.
SIENTE LA DIFERENCIA
Recupera la posición de flexiones de suelo. Levanta una mano, pásala por debajo del cuerpo y dirígela al otro lado de la cadera, manteniendo el torso todo lo recto que puedas.
Las propiedades maravillosas de la Miel de Abeja y cómo saber si es pura
Las propiedades maravillosas de la Miel de Abeja y cómo saber si es pura
La miel posee grandes riquezas naturales muy beneficiosas para el ser humano. Y es que algo tan natural, tiene que ser bueno. No sólo es uno de los edulcorantes naturales más ricos que existen, sino que, muchos remedios caseros para aliviar diversos malestares son hechos con la miel de abejas, que en Cuba se produce y se comercializa.
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Remedios Caseros
- Para el asma: Hervir, a fuego lento, 1 cebolla pequeña, 2 dientes de ajo y medio litro de jalea real, por espacio de 30 minutos. Dejar enfriar el preparado y añadir entonces la miel. Alternar 1 cucharada del preparado y 1 cucharada de miel cada dos horas.
- Para la resaca: Combinar media taza de miel con media taza de pomelo y hielo picado. Tomar a la hora antes de asistir a una fiesta para atenuar, en parte, los efectos del alcohol ingerido.
- Para el insomnio: Mezclar 2 cucharaditas de vinagre con 2 de miel en una taza de agua. Tomar un cuarto de taza antes de acostarse.
- Para las quemaduras leves. Colocar 2 ó 3 cucharadas de miel sobre la quemadura lo que proporcionará un rápido alivio del dolor y la picazón.
- Para la tos: Hervir un limón en agua que lo cubra durante 10 minutos o hasta que se ablande la corteza. Cortar por la mitad y extraer el zumo. Colocar el zumo del limón en un vaso. Agregar 2 cucharadas de miel. Tomar 1 cucharadita cada 4 horas.
- Para las úlceras, estómago y duodeno: Tomar una cucharadita de miel, en ayunas, diariamente, una hora antes del desayuno, trague lentamente la miel después de ser diluida en la boca.
- Para los trastornos intestinales o diarreas: Disolver miel en una jarra con agua y tomar como bebida diaria. Actúa eficientemente como antiséptico de la flora intestinal, especialmente si se trata de niños lactantes.
- Para la colitis y el estreñimiento: Añadir 1 ó 2 cucharadas de miel como endulzante en 200 gramos de cualquier alimento lo cual ayudará a controlar la actividad de los intestinos.
- Para el sistema nervioso: Tomar 1 cucharadita de miel, seis veces al día, le proporcionará tranquilidad y sosiego. Puede añadir en un vaso de leche para descansar más fácilmente.
- Para la ictericia: Hervir 30 hojas de salvia en 1 litro de agua durante 10 minutos y luego endulzada con una cucharadita de miel. Tomar tres tazas al día.